Data: 01/04/2020
Iturria : Irekia
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La consejera de Empleo y Política Sociales, Beatriz Artolazabal, llama a la cooperación interinstitucional y la colaboración público-privada para mitigar desde la solidaridad las situaciones de riesgo añadido generadas durante esta difícil

El Lehendakari se ha acercado esta mañana, junto a la consejera de Empleo y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, a todas las organizaciones sociales que en su día a día trabajan por las personas más vulnerables de nuestra sociedad y que, durante esta crisis sanitaria, han redoblado esfuerzos por llegar a las personas más necesitadas.

A través de una video-conferencia que ha tenido como objetivo simbolizar la colaboración entre el Tercer Sector Social y el Gobierno vasco, Iñigo Urkullu les ha trasladado su agradecimiento personal por la labor realizada siempre y, especialmente, en estos tiempos difíciles. El Lehendakari también les ha animado para seguir en este camino de colaboración como el mejor ejemplo, ha dicho, de auzolana, de trabajo por los que necesitan de más ayuda. En este contexto, ha recordado también la importante labor que el tercer sector y el voluntariado realiza cada día, reforzada en esta época través de la herramienta ‘Solidaridad Organizada. Guztion Artean’.

Durante el acto se ha contado con la presencia de Pablo González, responsable de Gorabide, en calidad de presidente de la red de redes del Tercer Sector Social ‘Sareen Sarea’ y presidente de la Mesa de Diálogo Civil; el director de Cáritas Bizkaia, Carlos Bargos; una representación del voluntariado de Euskadi; y el obispo de la Diócesis de Bilbao, Mario Iceta.

Por su parte, la consejera Artolazabal les ha destacado como la “mejor antena” para conocer y encauzar las necesidades de la sociedad vasca en un momento donde la crisis del coronavirus puede multiplicar las opciones de riesgo para colectivos vulnerables como menores, inmigrantes, personas en exclusión, mayores, mujeres maltratadas, personas jóvenes o personas con discapacidad.

En este contexto, ha señalado que “la cooperación interinstitucional  y  la  colaboración público-privada son las claves para contener y mitigar desde la solidaridad  las situaciones de riesgo añadido que esta crisis sanitaria y económica puede suponer para los colectivos más vulnerables”.

Las organizaciones

Asimismo, desde Cáritas Bizkaia, su director Carlos Bargos, ha afirmado que, ahora, las personas en exclusión “son las prioritarias porque no sólo son las primeras en sufrir los efectos inmediatos de esta situación, sino que además son las que van a padecer especialmente las consecuencias posteriores”. En este sentido, ha llamado, en nombre de Cáritas, “a sumar voluntades y recursos por parte de todos los agentes políticos, sociales y económicos para no dejar a nadie atrás en la salida de esta crisis”.

Por parte de Sareen Sarea, Pablo González, ha recordado que el tercer sector social de Euskadi está “completamente volcado ahora mismo en atender, una vez más, a los que más nos necesitan”.  Un despliegue que, ha dicho, no sería posible sin la movilización de miles de personas profesionales y voluntarias, “a las que, al igual que hacemos cada día con el personal sanitario desde los balcones de nuestras casas, es preciso agradecer la entrega con la que intervienen cada día en la primera línea de atención a las personas que más lo necesitan”.

El obispo de Bilbao, Mario Iceta, ha subrayado que la Iglesia está redoblando esfuerzos por acompañar a las personas más vulnerables, poniendo a disposición de las instituciones públicas, y en coordinación con ellas, los medios humanos y materiales que sean necesarios.

“Se han multiplicado los actos y formas de solidaridad, la ayuda generosa y anónima”, ha señalado Iceta tras recordar el trabajo que hace a diario, por ejemplo, el comedor de los franciscanos de Irala, los claretianos del Corazón de María o Cáritas, entre otras.

Finalmente, desde el voluntariado, Iñaki Malaxetxebarria, de Cáritas Bizkaia-Programa de Infancia, ha recordado que “aún siendo conscientes de que el secreto del éxito de los proyectos de infancia radica en las dinámicas de grupo presenciales, estamos adaptando nuestra respuesta a la situación de confinamiento actual”. Una labor que realizan, por ejemplo, a través de contacto telefónico planteando propuestas de actividades que los niños y las niñas pueden desarrollar en casa; así como con el reparto de comida entre las familias del proyecto que lo han demandado, entre otros.